El marido de Aoi ha estado luchando con el dinero debido a un negocio fallido. Abrumada por las deudas, Aoi fue personalmente a pedirle al acreedor que redujera la deuda. Esta persona respondió a su propuesta y quería que ella trabajara como su sirvienta, y la esposa estuvo de acuerdo, pero con las implicaciones del acreedor no así.